Salmo 102

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El Salmo 102 es un perfecto ejemplo de la ceguera que durante siglos ha embargado a judíos y a cristianos por igual. Su tema es el de un hombre mortalmente afligido que derrama ante Yahweh toda la angustia de quien ve su vida desgastarse día a día sin haber visto cumplida su liberación. Sin embargo, hacia el final, cuando ya todo parece haber sido dicho, la sorpresiva respuesta que al enunciante da el propio Yahweh constituye la revelación más maravillosa imaginable, respuesta que ha quedado registrada en la carta «A los hebreos» como un testimonio acerca del Hijo de Dios.


 

Oración de un afligido cuando desfallece [1] y delante de Yahweh derrama su meditación. [2]

¡Yahweh, presta atención a mi oración y llegue hasta ti mi clamor por ayuda! ¡No ocultes de mí tu presencia [3] en el día de mi angustia! [4] ¡Inclina hacia mí tu oído en el día en que clame! ¡Apresúrate a responderme!

Y es que mis días se consumieron en humo y mis huesos están quemados como leña seca. Mi corazón está plagado como la hierba y seco, pues hasta me he olvidado de comer mi pan. Al sonido de mis hondos suspiros se ha pegado a mi carne mi esencia más profunda. [5] He venido a parecerme al pelícano del desierto, he venido a ser como búho de los lugares secos. Me he mantenido en alerta y soy como un gorrión solitario sobre el techo. Mis enemigos me reprochan todo el día: los que me tienen por tonto [6] se han conjurado cuando yo comía ceniza como pan y mezclaba mi bebida con llanto a causa de tu enojo y de tu ira, cuando me levantaste para luego arrojarme. Mis días son como sombra que declina y me estoy secando como la hierba.

¡Pero tú, Yahweh, estarás por siempre! ¡Y tu recuerdo, de generación en generación! ¡Tú te levantarás y tendrás compasión de Sión, porque es tiempo de favorecerla, porque ha llegado el tiempo señalado! [7] Y es que tus siervos han tenido beneplácito hacia sus piedras y han mostrado favor por su polvo. Asimismo, las naciones temerán al nombre de Yahweh y todos los reyes de la tierra a su gloria. Ya que por entonces habrá construido Yahweh a Sión y habrá sido contemplado en su gloria; se habrá vuelto, por entonces, hacia la oración del despojado y no habrá despreciado la plegaria de ellos…

¡Se escribirá esto para una generación posterior y un pueblo recién creado alabará a Yah! ¡Pues por entonces se habrá inclinado Yahweh desde la altura hacia su santo; desde el cielo hacia la tierra para prestar atención, para escuchar el sollozo de un preso [8] y para liberar [9] a los que estaban condenados a muerte! [10] ¡Para publicar el nombre de Yahweh en Sión y su alabanza en Jerusalén en el reunirse a una de pueblos y de gobiernos para servir a Yahweh!

Se ha debilitado el vigor en el camino; él ha recortado mis días. Yo digo: ¡Dios mío, no me quites en la mitad de mis días, en la generación de las generaciones, [11] en tus años, antes de tiempo! ¡Has fundado la tierra y el cielo es la obra de tus manos!

Ellos se desharán, pero tú eres aquel que permanece; y todos ellos, como ropa se gastarán, y como una vestimenta. ¡Pero al renovarlos tú, serán renovados! [12] ¡Pues tú eres el único [13] y tus años no llegarán a su fin! [14] Los hijos de tus siervos llegarán a habitar confiadamente y sus descendientes serán estables delante de ti.

 

Notas

[1] כי־יעטף. La raíz עטף significa ante todo «enrollar(se)», lo cual, en este caso, ciertamente da la idea de quien se ensimisma en medio de una gran tristeza o angustia; o bien, en un sentido análogo pero más corporal, quien estando acostado en medio de dicho estado anímico se enrolla y adopta lo que suele llamarse una posición fetal. El sentido del salmo parece sugerir más bien esto último.

[2] שיח. Según el contexto, este término puede traducirse tanto en «meditación» como en «queja». En el caso presente, dado el estado de ánimo del afligido que ora según se encuentra descripto en el título del salmo (ver la nota anterior), se tiene la sensación de que se trata de ambas cosas: de una meditación quejumbrosa o de una queja meditabunda.

[3] פניך. O bien, «tu rostro».

[4]  ביום צר לי.

[5] עצמי.

[6] מהוללי.

[7] כי־באה מועד. El término מועד tiene una doble acepción espacio-temporal y su uso más frecuente tiene que ver con las festividades de Yahweh tal como se encuentran dispuestas en la instrucción dada a Moisés, tanto en lo que hace al lugar donde debían celebrarse —es decir, allí donde Yahweh hubiese puesto su nombre, es decir, su presencia— como en el tiempo prescripto para que el pueblo se reuniese para hacerlo. De ahí, también, que signifique «reunión» o «asamblea». También cabe destacar aquí la expresión אהל מועד («tienda de reunión»), la cual se refiere al tabernáculo de Dios en el desierto, desde el cual Moisés y Aarón eran frecuentemente convocados para recibir sus directivas.

[8] אנקת אסיר.

[9] לפתח. La raíz פתח, que en su forma qal significa «abrir», en su forma piel se traduce mayormente como «soltar» o «liberar».

[10] בני תמותה. Literalmente, «hijos de la muerte». La situación que sugiere esta expresión es la de personas que por haber sido condenadas a muerte (¿acaso secretamente?) son mencionadas en tan estrecha relación con la misma como los hijos lo están de sus progenitores, dando así una idea de destino. Este tipo de atribución generativa a los sustantivos abstractos —tal el caso, también, de la expresión aramea בר אבדנא, «hijo de perdición» — se da, por lo demás, con suma frecuencia en muchas lenguas semíticas antiguas.

[11] בדור דורים.

[12] תחליפם ויחלפו.

[13] ואתה־הוא.

[14] לא יתמו.