El libro del profeta Oseas consta de dos partes: la primera de ellas, en la que Yahweh ordena al profeta tomar para sí dos mujeres con el fin de establecer, a manera de símiles, lo que ocurriría con Israel en los últimos días; la segunda y más extensa es un apasionado discurso directo asumido por el propio Yahweh contra Efraín. En este último se pone de relieve el desconocimiento de Dios por parte de los descendientes de José, su confusión y su carnalidad, todo lo cual los llevaría a equivocarse grandemente y a pactar con el asirio, equiparándolo con Yahweh.
El cuadro que presenta el salmo 83 jamás tuvo lugar en los días en que el pueblo de Israel moraba en la tierra de Canaán, en el Antiguo Medio Oriente. Su tema es el de una conspiración generalizada de todos los pueblos a su alrededor —entre los cuales, sin embargo, sugestivamente, Egipto está ausente—, los cuales aspiran a destruir por completo al pueblo de Dios a fin de poseer su territorio. Puesto que se trata, evidentemente, de un símil profético llamado a transcurrir en el final de la era presente, hoy ofrezco aquí mi traducción de su texto hebreo.
Mariano FrancoComentarios desactivados en La carga que fue en el año en que murió el rey Acaz (Isaías 14:28-32)
El libro del profeta Isaías registra una breve y enigmática «carga» profética contra Filistea relacionada con los días en que el imperio asirio comenzaría a hacer sentir allí todo su poderío militar en pos de la conquista y el sometimiento de toda la región. La misma menciona a un misterioso ser seráfico, figura que resurge más adelante en otro pasaje del mismo libro. Además de publicar aquí mi traducción del texto hebreo de esta «carga», me he propuesto, al momento de anotarla, brindar algunas claves a propósito de este misterioso ser y su relación con el fin de la era.
Mariano FrancoComentarios desactivados en La carga de la palabra de Yahweh en la región de Hadráj (Zacarías 9-11)
El evangelio de Juan ha vuelto célebres unas palabras incluidas en una de las dos «cargas» proféticas que se encuentran en el libro del profeta Zacarías al aplicarlas a la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén. Sin embargo, al profundizar en la lectura de los tres capítulos que contienen este misterioso pasaje, se descubre que su convulsionado contexto profético trasciende grandemente al evento reseñado por el evangelista. La presente traducción anotada de dichos capítulos se propone reponer ese contexto con vistas a que el lector atento pueda discernir en el mismo todas las marcas del fin de la presente era.
Mariano FrancoComentarios desactivados en La carga de Tiro (Isaías 23)
Dentro de la serie de «cargas» que encontramos en el libro de Isaías, la que ocupa su capítulo veintitrés se dirige a Tiro, la antigua ciudad de la costa de Canaán que, gracias a su comercio marítimo y su despliegue hacia el Occidente —donde fundara, en el norte de África, la ciudad de Cartago— surgió en sus días como una poderosa talasocracia. Sin embargo, en los últimos días de la era, Tiro perdería definitivamente su imperio de ultramar y dejaría todas sus ganancias al pueblo de Dios. La traducción del hebreo que sigue a continuación da cuenta de dicha predicción.
Según leemos en las Escrituras, la ciudad de Nínive prestó una vez oídos a la amenaza de ruina que Yahweh le enviara por medio del profeta Jonás, arrepintiéndose de su maldad y poniendo por una temporada su confianza en Él. Sin embargo, tratándose de la orgullosa capital del imperio asirio, no pasaría demasiado tiempo hasta que retornase a su auténtica naturaleza como centro mundial de la violencia y del despojo de los pueblos de su región. Tal es el contexto profético del libro de Nahum, compuesto por entero por esta «carga de Nínive» cuya traducción anotada del hebreo presento aquí.
Mariano FrancoComentarios desactivados en La carga de Egipto (Isaías 19)
El capítulo diecinueve del libro de Isaías ha desconcertado a los eruditos de todos los tiempos, pues describe ciertos acontecimientos que sobrevendrían sobre Egipto durante la hegemonía asiria de comienzos del siglo VII a. C. que jamás tuvieron lugar en aquellos tan lejanos tiempos. En realidad, tal como ocurre con el resto de los libros de los profetas, se trata de una profecía sobre nuestros días que describe la forma en la que Dios conducirá a cierta nación al arrepentimiento y a la salvación. En virtud de ello, presento aquí mi traducción del texto hebreo de esta «carga de Egipto».